Travesía de Enciso a Yanguas. 13 de abril de 2024

Fieles a nuestras citas programadas, 4ª de este año 2024, 30 osados caminantes nos reunimos a las 9:15 en el parking de Enciso, situado al sur de La Rioja, en el valle alto del río Cidacos, para dar comienzo a una jornada montañera, entre este Municipio y la localidad de Yanguas ubicada en las Tierras altas de Soria.

Tras dejar 5 vehículos en destino de etapa, nos reunimos todo el grupo, en “La Escurquilla”, una de las 7 Aldeas pertenecientes a Enciso, deshabitada en 1963. Durante este primer tramo compartimos senda con los corredores del TRAIL HUELLAS DE DINOSAURIO MUNILLA 2024, que por lo que pudimos comprobar, tenían bastante más prisa que nosotros. Desde aquí y con un sol justiciero, remontamos el barranco del Escudero, hasta dar con una joya etnográfica muy bien camuflada en el entorno, el Nevero/a que tiene Enciso en el monte de la Nevera, pertenece a los de tipología de abastecimiento, y consiste en una excavación cilíndrica revestida en su interior con mampostería y cubierta con una cúpula superpuesta, también de piedra, agradeciendo los 14º grados menos, que hacía en su interior. En 2 km más, alcanzamos la cima del día, Pico de Nocedillo (1.525m.), donde nos deleitó con unas vistas de las que alimentan el alma, a partir de aquí y entre pinos comenzamos en suave descenso hasta “La Vega”,  pueblo de la comarca de Tierras Altas que pertenece al municipio de Yanguas y en el que a decir por lo que comprobamos in situ, despertó el deseo de alejarse de todo lo terrenal para poder alcanzar lo prometido.

Después de un refrigerio en la chopera del barranco de Sancabras, que más que falta era necesidad, continuamos por una sombría y elegante senda, hasta dar con vistas a destino “Yanguas” de origen prerromano y actualmente declarado uno de Los pueblos más bonitos de España, que pudimos constatar sin ningún tipo de duda.

Como ya se había adelantado en la introducción de la jornada, “Sí se tercia y estando en zona neurálgica por excelencia del torrezno, cabría hacer lo propio ”?, pues se terció, dimos buena cuenta de unos torreznos y encurtidos, acompañados de las cervecitas de rigor, para dar paso a la comida en El Albergue, donde nos dimos cita 20 gastronómadas.

Para finalizar, recorrimos el Pueblo, dando por finalizado un momento único que de hecho ya es historia, por lo que amenazamos con volver. Gracias